La Kabbalah no es inquietud programada por neófitos para hablar sobre el mas allá y menos una escusa para aventureros de palabrería, es una ciencia con remotos orígenes en la profundidad de los tiempos.
Kabbalah es doctrina. Raíces sagradas del pueblo Judío atreves de milenios conservadas y cultivadas por pensantes, técnicos, filósofos y secretistas. Es el gran puente que une a la humanidad. Kabbalah es encarnación de pensamientos con principios ocultos para la exploración en la nave del misterio, es el estudio del origen filosófico del conocimiento en la totalidad; partiendo del simbolismo oculto de las letras hebreas, hurgando en los misterios incognitos e inicia el conocimiento humano, apoyada por estudios de grandes maestros como Tigravi, Hasbanish, Datraes y otros. En la Kabbalah una promesa permanece oculta, y solo seres escogidos son garantes de su conocimiento y secreto. El erudito códice llamado “Zohar” Alberga un tesoro de guardados principios estudiados por el gran Rabbi Moisés de León.
Es fácil caer en mentirosas especulaciones más la quimera de la ciencia y ocultismo han demostrado lo inmutable del acervo de conocimientos conservados por milenios desde los tiempos de Moisés en Egipto.

De donde arranca su sabiduría?
La larga Huella por el camino de la razón hasta las innumerables cavernas del desierto fueron sintetizadas por los hebreos trashumantes de Etiopia, esclavos de Egipto y constructores de los templos de Karnák y Lúxor, y las pirámides de Keops – Kefren y Micerinos; sus jeroglíficos esculpidos en los altares y tumbas de Reyes Reinas y faraones, los ritos del fuego, las iniciaciones, procesiones, canticos y adoraciones simbólicas enlazadas con leyendas testimoniales silenciosas con sus misterios y sus claves difíciles de descubrir por profanos y aventureros. Desde Sócrates hasta Tito Livio haciendo escala en cada uno de los grandes pensadores intermedios: Platón, Pitágoras, Plinio, Diógenes y otros, encontramos estelas del pensamiento la astronomía y el movimiento terráqueo alrededor del sol; la teoría de otros mundos y otras razones, la atracción planetaria, la luna sobre los mares y las aguas, la posición de las estrellas hasta la ley de gravedad estudiada por Newton.
Plutarco estudio la Mutua atracción entre todos los cuerpos. La armonía de las esferas de Pitágoras; como ciencias ocultas también se estudiaban en esa época. La electricidad, química, refracción de la luz y muchos otros conocimientos son guardados por la Kábala como el estudio del vapor, el secreto químico de la fotografía en la Cultura Jónica, la cámara oscura y la sensibilización de los metales para enchapes en oro, plata y cobre por oxidación.
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